El agua descalcificada y sus múltiples ventajas.
Cada día más, el descalcificador de agua se está volviendo un electrodoméstico más usual en nuestros hogares. Son muchas las familias que apuestan por un agua mucho más pura para sus casas, sin embargo, aun hay muchas personas que no son conscientes de los inconvenientes del agua con cal. El exceso de cal en el agua puede dañar seriamente nuestra salud y nuestro bolsillo.
El agua descalcificada supone, un descenso en el número de averías de nuestros electrodomesticos, menos consumo energético y de detergentes, mayor calidad de limpieza de suelos, ropa, cuberteria, vajilla, y una piel y un pelo mucho más sanos.
¿Qué ventajas encontramos en el agua descalcificada?
Utilizamos menos jabón y detergentes.
Basta con mirar la información que los fabricantes de jabones para la ropa ofrecen en la etiquetas. Podemos reducir el consumo de estos productos hasta la mitad con un agua descalcificada. Además, el agua descalcificada es mucho más respetuosa con los tejidos y las fibras de algodón u otros materiales. No solo reducimos cantidad de producto sino que hacemos una limpieza mucho más efectiva, especialmente en ropa blanca. Incluso podemos aumentar el porcentaje de durabilidad de nuestra ropa hasta en un 15% más.
Los electrodomésticos sufren menos.
Los electrodomésticos sufren menos debido a la ausencia de cal, que alarga la vida útil de todo electrodoméstico que funcione con agua. Sin descalcificador, la cal se va acumulando diariamente en las piezas básicas de los electrodomésticos, llegando a producir averías que son muy costosas. Además, con un agua descalcificada podemos observar, como además de la ropa, la vajilla y cubertería no quedan rastros blancos ocasionados por el exceso de cal, así como en los grifos y superficies donde caiga agua con cal.
Con el agua descalcificada ahorrarás dinero en tu factura del agua, luz y gas.
Esto es debido a que la cal se va acumulando poco a poco en las tuberías o los calentadores, capa a capa, hasta varios centímetros. En zonas como la cuenca mediterránea, el agua tiene una dureza muy elevada, siendo recomendable el cambio de tuberías cada 10 años. Si compramos un descalcificador, la cal acumulada con los años se irá diluyendo hasta desaparecer en pocos meses.
El agua descalcificada es buena para tu salud y para el medio ambiente.
Hay personas que sufren de dermatitis atópica, siendo la cal uno de los factores que propician los picores molestos, además de resecar la piel. Con el agua descalcificada, la ducha resultará mucho más placentera y agradable. Con un agua sin cal aliviamos también el malestar que causa la caspa. El agua sin cal nos ayuda a tener un pelo más brillante usando menos jabón y menos cosméticos.
Ayudamos al medio ambiente.
El agua descalcificada nos evita usar detergentes y jabones en dosis elevadas que son muy agresivos con el medio ambiente, ya sea en su proceso de fabricación como en su uso domestico e industrial.
Como podemos observar, el agua descalcificada tiene innumerables ventajas a tener en cuenta para nuestro día a día. No lo dudes y consultanos sobre nuestros modelos.